“Data is the new oil“- The Economist, 2017.
La prestigiosa revista hacía inferencia a cómo sectores tradicionales como el Petróleo y la Banca habían dado paso a las Big Tech, que en menos de una década pasaron a convertirse en las empresas más valiosas, más reconocidas, más admiradas y más rentables del planeta. The Economist se adelantaba, hace 4 años, a las discusiones que vemos hoy sobre anti-monopolio, sobre privacidad y sobre el impacto que el digitalizar todos los aspectos de nuestras vidas y de nuestra economía pudieran llegar a tener.
Pero, ¿qué tan importante y valiosa es, en realidad, la data? La respuesta puede estar en el más reciente “Plan del Quinquenio“, presentado por el Gobierno Chino hace un par de meses (este es el 14vo plan presentado desde mediados del Siglo pasado).
En él, las autoridades han designado 5 grandes “factores de producción” estratégicos; recursos de interés nacional que serán los pilares del crecimiento económico del gigante asiático en los próximos años:
- La tierra
- La mano de obra
- El capital
- La tecnología, y
- La data
El plan busca generar un modelo de intercambio de información no sólo entre empresas y el gobierno sino entre las mismas empresas -incluso si compiten entre sí- nacionales y extranjeras, para facilitar la creación de un modelo donde todo se pueda convertir en “inteligente”.
Un modelo en el que fábricas, ciudades, hospitales y demás corran sobre la mejor de la información y puedan funcionar de manera articulada para mejorar la productividad y competitividad del país y contrarrestar algunas de las medidas impuestas por Estados Unidos y sus aliados.
Un modelo en el que los carros autónomos se conviertan finalmente en una realidad, en el que las fábricas sepan en tiempo real el nivel de demanda de los productos que producen o ensamblan y puedan coordinar de manera autónoma la cadena de abastecimiento disminuyendo tiempos muertos, costos y demoras.
Hoy por hoy, China es líder mundial en temas como Inteligencia Artificial (le recomiendo AI Superpowers: China, Silicon Valley, and the New World de KaiFu Lee si quiere ahondar en el tema), la tecnología de redes 5G y el despliegue de las mismas, la creación e implementación de ciudades inteligentes y el uso de tecnologías como reconocimiento facial y pagos digitales.
Mire bien: la columna vertebral de todos ellos es la data. Data que se puede convertir en información. Información que sirve para tomar mejores decisiones. Y es que aunque China fue uno de los pocos países cuyo PIB creció durante la pandemia, la verdad es que el componente digital de su economía fue el gran motor de dicho crecimiento. En 2020, creció cerca de 10%, representando 39% del total de la producción interna bruta y se espera que crezca, en promedio 15% anual durante los próximos 5 años.
Muchos creemos que la hegemonía norteamericana sucumbirá al poder de los Chinos, y los próximos 5 años son críticos para ambas naciones y sus aspiraciones.